El ciber-disidente Jiang Lijun fue juzgado hoy en Beijing por incitar a la subversión del poder del Estado, a pesar de las recientes dificultades del Gobierno de condenar a los ciudadanos que utilicen Internet para criticar al régimen


"El jefe de la acusación de incitación a la subversión del poder del Estado puede solicitar, en el peor de los casos, una condena perpetua", según su abogado, Mo Shaoping, que solicitó la absolución de su cliente.

El Fiscal acusó a Lijun de querer instaurar la democracia por medios violentos. Sin embargo, el acusado, detenido en noviembre del año pasado durante el XVI congreso del Partido Comunista, negó tal supuesto.

Según la acusación, Jiang Lijun es responsable de una alerta por bomba, que él niega. El acusado podría haber mantenido una estrecha relación con otros ciber-disidentes, entre ellos el estudiante Liu Di.