Un grupo de investigadores han creado un componente para redes ópticas que señalan que puede aplicar cifrado a las conexiones de este tipo para lograr protegerlas incluso cuando esos datos viajan a velocidades de 100 Gbytes por segundo.

Este descubrimiento podría permitir a las operadoras y grandes empresas asegurar sus comunicaciones con una capa más de cifrado en el caso de uso de conexiones WAN. La empresa Telcordia está ya buscando partners para poner en marcha este “codificador óptico” que permitiría ser programado remotamente para cambiar la clave de cifrado.

Las comunicaciones ópticas tenían la limitación precisamente de ese cifrado, que podía limitar la velocidad a 10 GBps, pero según Telcordia, con su nuevo chip son capaces de soportar diez veces ese ancho de banda en comunicaciones cifradas, algo que podría ser tremendamente útil para todo tipo de redes.

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