Redes p2p, foros, páginas web, chats... Existen más de cuatro millones de zonas en internet con material sexual de menores. Unas nacen -500 al día según la policía- y otras desaparecen. La red, que llega a albergar miles de comunidades virtuales con incluso 3.000 usuarios aficionados a este tipo de pornografía, ha convertido este delito en global. También su búsqueda.

Fotografías de menores desnudos, bebés violados. Todo puede encontrarse en la red. Algunos lo producen pero muchos lo consumen, a veces por error. Cualquiera puede bajarse una película con el cándido titulo de Blancanieves y encontrarse escenas de sexo explícito con menores. Pero estas cosas no sólo existen en las redes de intercambio de archivos. También pueden encontrarse en algunos foros y en páginas porno. A veces, incluso sin conocimiento de los propios gestores del sitio.

La policía estudia ahora con los principales servidores españoles -Telefónica, Orange y Jazztel, entre otros- la creación de un filtro que se dispare al acceder a determinadas páginas que contengan pornografía. "No hace falta que sea pornografía infantil", aclara Enrique Rodríguez, inspector jefe de la Brigada de Investigación Tecnológica (BIT), creada en 2001 para perseguir delitos como éste, cada vez más frecuentes con la expansión de la red.

La idea de ese filtro, que ya se ha experimentado en países como Noruega, según Rodríguez, es que cuando el internauta quiera acceder a estos sitios se encuentre antes con una página de la policía. "Se hallarán ante un mensaje disuasorio que diga que la página está siendo vigilada y que la posesión de material de pornografía infantil es un delito", explica el inspector jefe de la BIT. Para la policía este filtro es una manera de prevención doble: por un lado, que la persona que busque en estas páginas pornografía infantil no acceda al sitio y, por otro, que las web se cuiden y vigilen mucho los contenidos que alojan. "Internet ha facilitado el contacto entre pedófilos pero también ha facilitado la investigación de estos delitos", dice Rodríguez.

Desde 2001 la policía ha detenido en España a unas 600 personas por temas relacionados con la pornografía infantil. Estos suponen el 50% de los delitos que se comenten en internet, ya que en España está penada la producción, venta, distribución y exhibición de contenidos sexuales en los que aparezcan menores. Desde 2004 se considera delito también su posesión. Sin embargo, las condenas relacionadas con estas infracciones, sobre todo la de posesión, son muy bajas.

El Código Penal castiga con penas de tres meses a un año de cárcel a la persona que posea para su propio uso material pornográfico en cuya elaboración se hubiera utilizado a menores, pero muchos se libran de la cárcel porque no tienen antecedentes. Algo que las asociaciones contra la pornografía infantil critican. "Las penas deben tener un carácter persuasivo y éstas no lo tienen. Se deberían imponer condenas más fuertes porque el delito es grave", sostiene Guillermo Cánovas, presidente de Protégeles, una organización contra la pornografía infantil.

Fuente: El Pais.