En 2003, Andy Lin, de 51 años de edad, era administrador de sistemas Unix en Medco Health. Cuando comenzaron los rumores de absorción de esa empresa por parte de Merck, Lin pensó que podía perder su empleo, por lo que introdujo una bomba lógica en el sistema, es decir, un código oculto destinado a activarse el día de su propio cumpleaños: 23 de Abril de 2004...

Pero debido a un error de programación, la bomba de Lin no funcionó, de modo que la reparó y reprogramó para activarse el mismo día pero del año siguiente (2005), y eso a pesar de que los temores de Lin al despido no se vieron confirmados.

No obstante, en enero de 2005 un colega de Lin investigaba un error del sistema cuando descubrió la bomba, lo que volvió a frustrar el ataque, esta vez definitivamente. De haber tenido éxito, la bomba lógica de Lin hubiera destruido datos sanitarios críticos en 70 servidores.

Lin ha sido juzgado anteayer y se ha declarado culpable. Se enfrenta a una pena máxima de diez años de cárcel y un cuarto de millón de dólares de multa (unos 175.000 euros).

La sentencia se conocerá el próximo 8 de enero.

Fuente: Kriptopolis