El Departamento de Defensa estadounidense se vio obligado a desconectar cerca de 1.500 ordenadores el pasado miércoles para protegerse de un ataque cibernético, informaron fuentes del Pentágono.

El secretario de Defensa, Robert Gates, comunicó esta información sin ofrecer demasiados detalles sobre lo ocurrido, aunque sí aclaró que los sistemas informáticos apagados retomarían el trabajo próximamente. Gates aseguró que el Pentágono sufre cientos de ataques diarios, y este último no tuvo un impacto adverso en las operaciones del Departamento.

Los empleados cuyos ordenadores resultaron afectados pudieron continuar su labor empleando otros dispositivos como sus BlackBerry de bolsillo. Durante una reunión informativa, Gates señaló que "obviamente" disponen de "sistemas de respaldo", pero admitió que "habrá algunas alteraciones administrativas e inconvenientes para el personal".

La decisión de detener los ordenadores se tomó tras detectar una infiltración en el sistema, por causas que están siendo investigadas y, por tanto, no han sido determinadas todavía. Cuando se le preguntó si su cuenta de correo fue afectada, Gates respondió: "Yo no utilizo correo electrónico. Soy una persona que usa muy poco la tecnología".

Por su parte, el teniente comandante de la Marina y portavoz del Pentágono, Chito Peppler, explicó que los sistemas del Departamento de Defensa son probados todos los días para hacer frente a distintos tipos de ataque.

"La naturaleza de la amenaza es grande y diversa, e incluye a piratas cibernéticos por diversión, autodenominados vigilantes cibernéticos, varios grupos con agendas ideológicas o nacionalistas, actores transnacionales y naciones-estado", agregó Peppler.

Fuente: EP