La condena a Ronald Kline por posesión de pornografía infantil en su ordenador ha abierto un dilema moral en el tema de la seguridad en Internet. Sobre todo porque la prueba principal para inculparle fue obtenida por un hacker que se metió ilegalmente en su PC.
El condenado tendrá que pasar 27 meses en la cárcel y, además, quedará señalado como pederasta para el resto de su vida. El hacker, que tenía 20 años cuando lo hizo, y se llama Bard William y es de Canadá- se coló en su ordenador colgando un archivo manipulado en una lista de correo conocida por ser utilizada por gente que se bajaba pornografía infantil de la red.
No existe ningún tipo de justificación para las acciones de Kline. Pero William es también culpable por haber creado malware y por introducirse -también- en los ordenadores de gente inocente.
Si el presidente Bush no tiene derecho de espiar a los ciudadanos estadounidenses, a cualquier niño de Canadá también habria que impedírselo. Y es que aún no ha habido ninguna demanda legal en contra de William...
Fuente:http://elespia.siliconnews.es/2007/02/un_hacker_que_descubre_a_un_pe.html
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